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Ruta 5 de Elizondo a Zugarramurdi
Nos dirigimos por la autopista hasta el pueblo de Elizondo. Tras aparcar el coche visitamos este pueblo. Elizondo es un lugar de la Comunidad Foral de Navarra (España), capital del Valle de Baztán situado en la Merindad de Pamplona y a 57,5 kilómetros de la capital de la comunidad, Pamplona. Como el resto del municipio de Baztán, pertenece a la zona vascófona de Navarra. Su población en 2011 fue de 3.297. Es capital y centro comercial del valle. Emplazado a ambos lados del río Bidasoa o Baztán. Se trata de un asentamiento más urbano que rural dada la abundancia de comercios, bares, restaurantes, talleres, sucursales bancarias, etc., siendo los servicios su base socio-económica. El núcleo principal comenzó siendo un número reducido de casas, junto al río, en lo que hoy es la calle Jaime Urrutia, desde la plaza de los fueros hasta el molino. El crecimiento del pueblo se ha hecho longitudinalmente a lo largo del río.
Nuestra visita se adentrará en la parte más antigua del pueblo entre las calles Jaime Urrutia y Braulio Iriarte. Comenzamos por la calle Santiago por donde pasa la carretera general.
Pasamos por casas emblasonadas.
La iglesia de Santiago
Llegamos a la plaza principal donde se encuentra el edificio de la Casa Consistorial. Ejemplo de arquitectura decimonónica y bello edificio de fachada de sillería.
Junto al Ayuntamiento en la plaza principal y por esta calle a través de este arco paseamos junto al río por la Calle Pedro Axular. Llegamos y atravesamos un puente sobre el río Baztán y continuamos por la calle Giltxaurdi.
Continuamos nuestro paseo por la Calle Braulio Iriarte hasta llegar al Puente Antxitonea. Desde él podemos fotografiar uno de los rincones con más encanto del pueblo.
Seguimos paralelamente al río por esta calle de Braulio Iriarte
Atravesamos un segundo puente y regresamos de nuevo a la calle Santiago por donde pasa la carretera general . Damos por terminada nuestra visita a este pueblo y regresamos hacia donde aparcamos el coche.
Terminada nuestra visita a este bonito pueblo continuamos nuestro circuito y nos dirigimos al pueblo de Urdax.
Paseamos por este barrio que se encuentra muy cerca de la famosa cueva que visitamos
La gruta de Ikaburua forma parte del conjunto de cuevas de la localidad de Urdazubi/Urdax, considerado el yacimiento prehistórico del Paleolítico superior más importante de Navarra. En las diversas campañas arqueológicas desarrolladas en este entorno los investigadores han hallado buriles, hojitas de dorso, raspadores, arpones elaborados en sílex, una aguja de coser de hueso, restos de comida y de un enterramiento humano que demuestran que el hombre del Paleolítico vivió desde hace 10.000 hasta hace 20.000 ó 30.000 años en Urdazubi/Urdax. El yacimiento arqueológico alcanza el nivel Magdaleniense y en sus paredes se pueden observar varios grabados de extraordinario interés. Las primeras noticias de esta gruta datan de 1808, cuando se utilizó como refugio por personas que huían de las batallas de la Guerra de la Independencia.
A partir de 1965, comenzó a ser acondicionada como atracción turística, y en la actualidad es propiedad del Ayuntamiento de Urdazubi/Urdax, que ha habilitado tanto el interior como las zonas de acceso y el entorno de la cueva para que los visitantes puedan disfrutar en las mejores condiciones de este espacio natural único. El itinerario de la visita guiada comienza en una espacio de unos 30 metros de largo por 23 de ancho con una bóveda de estalactitas espectacular. A continuación acompañados en todo momento por un guía nos internamos en la cueva siguiendo el caudal del riachuelo Urtxume y tuvimos la oportunidad de ver varias salas donde las estalactitas y estalagmitas han construido escenarios de gran belleza.
Seguimos hasta llegar al pueblecito de Zugarramurdi. Incluido en la Ruta de la Brujería, es un pequeño pueblo de poco más de 200 habitantes enclavado en el Pirineo occidental navarro, rozando la frontera con Francia. Sus calles y caseríos blancos contrastan con la inagotable paleta de verdes que colorean su entorno.
A las afueras de la localidad, a 400 metros, descubrirá este conjunto natural de impresionante belleza. El arroyo Orabidea, que nace en el infierno según asegura su denominación en euskera "Infernuko erreka", ha excavado un túnel natural de 120 metros de largo con alturas de hasta 12 metros y dos galerías elevadas.
Entramos a visitar la cueva . Primero pasamos por el mirador. Bonita panorámica del pueblo
Bajamos hacia la entrada de la cueva
La cueva no contiene estalactitas, ni pinturas rupestres, pero sí un
atractivo singular gracias a su amplitud y a la leyenda que la
envuelve. En ella resulta fácil imaginar los akelarres,
situar los relatos que hablan de brujería, de rituales paganos y de
banquetes presididos por el diablo. Los nombres que recibe la gruta
acentúan su relación con este mundo mágico. Así, se le conoce como
"Sorgin Leze" (cueva de las brujas) en el lado más abierto
del túnel y como "Akelarre Leze" (cueva del akelarre) en la
parte más estrecha.
Entrada a la Cueva del Akelarre
El nombre de este conjunto cárstico hace mención a las celebraciones paganas que tenían lugar en algunas de sus salas en la antigüedad y que, en el Proceso Inquisitorial de 1609 a 1614, fueron presentadas como prueba evidente de que en Zugarramurdi se desarrollaban actos donde se ejercía la brujería.
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