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MONTPELLIER Ubicada a orillas del Mediterráneo, a 3 horas de Barcelona y de Italia, Montpellier representa lo mejor para una estancia de descubrimiento del sur de Europa. Famosa por ser una de las ciudades mas dinámicas de Francia por su gran programa cultural, Montpellier propone festivales de fama internacional, un patrimonio histórico medieval y moderno, una gastronomía excepcional y un culto por los grandes vinos. Comenzamos nuestra visita a esta ciudad por la gran Place de la Comédie o también llamada Plaza del Huevo por su forma Oval. Es el centro neurálgico de la ciudad, o esa es la impresión que me ha dado después de pasar por aquí. Se trata de una enorme plaza peatonal situada justo en los límites de la zona centro, y conecta con otros barrios importantes ya sea por proximidad o mediante el mítico tranvía que cruza la ciudad. Cuando digo enorme es porque lo es, parece un espacio concebido específicamente para montar tremendas manifestaciones, y de hecho parece ser que es uno de sus usos tradicionales, incluso tiene una historia sangrienta de centenares de muertos a manos del ejército en aquellas épocas en las que manifestarse era sinónimo de traición a la patria. En cualquier caso, aquí suele concentrarse muchísima gente de forma cotidiana y sin intención política, es un lugar muy conveniente para quedar, tanto por su ubicación como por todas las movidas que hay en la propia plaza o en las calles que la rodean.
En plan arquitectura se pueden ver varias fuentes muy majas como la Fuente de las Tres Gracias, el palacio de la ópera que da nombre a la plaza y unos cuantos edificios nobles de gran barroquismo. Alrededor de la plaza se levantan elegantes mansiones de Hausmann del siglo XIX.
Hay infinidad de bares y terracitas, restaurantes decentes y garitos de comida rápida,
La plaza vista desde otro ángulo, con el Boulevard Víctor Hugo
Continuamos nuestra visita por una de las calles peatonales la Rue de la Loge. Es una importante arteria comercial e histórico de la ciudad de Montpellier, situado en el centro histórico. Rue de la Loge y las calles adyacentes tienen muchas marcas famosas como Virgin Megastore , un restaurante de McDonalds, en una esquina está la Place de la Comédie y en la otra esquina en el extremo norte la Place des Martyrs de la Résistance. También hay muchas tiendas de ropa, tales Eram , Camaïeu , Etam , la tienda Majestic, Kookai etc...
Llegamos a la Place des Martyrs de la Résistance. Se encuentra la Prefectura.
Avanzamos por la Rue Foch hasta el Arco del Triunfo. A finales del siglo XVII, el administrador del Rey decidió construir dicho arco, imitación de las puertas parisienses, en honor a Luis XIV. Está construido en el lugar de una de las puertas de la antigua muralla.
Aquí se encuentra el Palacio de Justicia. Edificio de estilo neoclásico , construido en 1853, ocupa la antigua ubicación del Castillo de los Guilhem
Nada más pasar el Arco del triunfo , a la izquierda se encuentra la bajada que da a la Place Giral. Podemos ver al cristo en la cruz
En frente del Arco del Triunfo la entrada a la Place Royale Du Peyrou. Es una gran extensión flanqueada por árboles. Tiene sus orígenes en 1689. Esta explanada es un punto de encuentro habitual junto a la Place de la Comedie, por muchos jóvenes de la ciudad.
Esta plaza destaca por la Torre del agua, Chateau D'Eau. Esta torre de forma hexagonal fue construida para distribuir el agua potable. Con sus columnas corínticas , es uno de los monumentos mas bellos de la ciudad y como ocurre con muchas obras, es especialmente bonito al anochecer cuando permanece iluminado.
Esta fuente nutrida de agua por el acueducto de San Clemente , es una de las grandes maravillas de Montpellier , pero sin duda el acueducto no es menos y con sus casi 15 kilómetros de largo destaca de manera notable en esta localidad. El ingeniero Henri Pilot de Launay se inspiró del Puente de Gard, para construir en 1754 este acueducto. Ha permitido la llegada del agua potable a partir de los manantiales de la ciudad de Saint Clément.
Justo en medio de la plaza hallamos la escultura en homenaje al rey Luis XIV montando a caballo. Fue de las primeras construcciones en bronce de la ciudad
. Regresamos hacia el centro histórico y visitamos la Cathedrale Saint Pierre (Catedral de San Pedro). El papa Urbano V, antiguo estudiante en Montpellier, hizo construir en 1364, un monasterio y su iglesia, que sería transformada en catedral en 1536.
Continuamos callejeando por sus estrechas calles. Hay pequeñas plazas con animada vida de restaurantes y terrazas.
Terminada la visita de esta ciudad regresamos a por el coche que lo teníamos en el sótano de los grandes almacenes de las Galerías Lafayette junto a la Place de la Comedie
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